Alessandro Baricco: “Los libros ayudan a entrar en la vida”
Óliver Zazueta – Edición 492
El escritor italiano conversó sobre su obra y su visión de la literatura con estudiantes y visitantes del Ágora de la Biblioteca del ITESO, como parte del programa Guadalajara Capital Mundial del Libro
“Ante la duda, baila si tienes 16 años; si puedes, lee y baila, es la mejor opción; pero si llegas a los 25 y continúas bailando, en vez de leer, ahí ya hay un problema”, asegura Alessandro Baricco. De bailes, rebeliones y libertades se conversó la tarde-noche del pasado martes 24 de enero en una pletórica Ágora de la Biblioteca Dr. Jorge Villalobos Padilla, SJ, del ITESO, que con un público mayoritariamente joven recibió al novelista y ensayista italiano, quien llegó al lugar como parte del programa de Guadalajara Capital Mundial del Libro en una charla titulada “Teatro, novela y arte”, en la que poco se habló de teatro, algo más de novela y un buen tanto del arte literario.
En tertulia con José Israel Carranza, escritor, periodista y profesor del ITESO, y con la directora de la Biblioteca, Mónica Márquez, el autor de Seda (Anagrama, 1996) respondió inquietudes en torno al valor de la literatura en la vida de los jóvenes y acerca de los motivos detrás de su propia obra, así como sobre sus procesos creativos.
“Los libros ayudan a entrar en la vida, sobre todo a las personas que fueron heridas, desilusionadas o traicionadas. Alguien que lee es alguien que logró obtener un pedazo de mundo que no pudo obtener por sí mismo, y muchas veces no pudo porque se lo impidieron. Se escribe y se lee por rebelión, es una rebelión a todos los destinos más pequeños que tú”, expresó.
“Para configurar una geografía del sentido, o servir como guía a los jóvenes, ¿la literatura tiene responsabilidades que cumplir?”, cuestionó Carranza. “Yo no pienso que debamos obligar a los jóvenes a leer; es más importante empujar a los buenos autores jóvenes a escribir bien: si hacemos buenos libros, construimos buenos lectores. Es muy importante que puedan consumir muchas historias; cuando lo dejen de hacer será el final, no importa si es en videojuegos, libros, cine o cómics. La literatura, antes que nada, es libertad. […] Mi acto de escribir siempre fue una rebelión y una fuga: hago dos pasos huyendo, me paro, me rebelo y luego busco escapar de nuevo, y así toda la vida”.
Uno de los libros más recientes de Baricco, Lo que estábamos buscando (Anagrama, 2021), es una reflexión acerca de la pandemia. Más que por las cifras escalofriantes y las narraciones periodísticas, el autor se interesó por las condiciones y los deseos ocultos detrás de la aparición de la covid-19. El ensayo consta de 33 pequeños fragmentos que buscan que buena parte del trabajo la haga el lector; son una especie de relámpagos, explicó Baricco, con los que apenas en un instante de luz se puede ver la realidad. “Creo que nosotros, como civilización, buscábamos un accidente de este tamaño. […] Estábamos en una situación en la que sólo había una cosa por resolverse: enfermarse y después suspender todo, respirar, hacerse preguntas, hacer que resistieran los más fuertes y cayeran los más débiles. No fue sólo un incidente casual, y si no era esto, habríamos buscado otro, tal vez una guerra. El libro trata de entender lo que hicimos en la construcción genial de esta figura mitológica que fue la pandemia”, explicó.
El autor de Novecento (Anagrama, 1994) se despidió revelando algunos de los autores mexicanos referentes en sus lecturas, como Juan Rulfo, Carlos Fuentes, Daniel Sada o, más recientemente, Yuri Herrera, y dio una pista acerca de sus futuras gestas creativas, aunque pidió que por favor las personas asistentes a la charla no le contaran nada a la prensa: su próximo libro será un western metafísico.