Con la cabeza en la(s) nube(s)

Ejemplo de una nube tipo cumuloninbus. Foto: Wikimedia Commons

Con la cabeza en la(s) nube(s)

– Edición 474

La nube informática es un paradigma. La nube del cielo es un hidrometeoro. La nube sobre nosotros es un presagio. Tocar la nube es un deseo. Controlar la nube es controlar la vida

Hay nubes formadas con millones de gotitas de agua y partículas de polvo o sales. En ellas puede haber también microbios o pequeñas arañas. Entre ellas pasan aviones, globos, cohetes, cuerpos humanos o de aves, cometas. Pueden atravesar la Tierra o deshacerse en un parpadeo. Correr o estar quietas. Tener todas las formas. Parecen sólidas, contienen sólidos; pero si saltas sobre ellas, no caes en algodón.

Hay nubes hechas de bits, millones de millones de bits que pueden tener todas las formas. Pueden atravesar la Tierra o deshacerse en un parpadeo. Parecen sólidas, contienen sólidos, pero no puedes tocarlas.

Las nubes, reales o virtuales, toman la forma de nuestra imaginación. Son también, de distintas maneras, útiles para la vida: de las reales depende el clima del planeta; de las virtuales, el almacenamiento de datos acerca de cualquier cosa: vuelos espaciales, enfermedades, genomas, bibliotecas, cárceles. Lo que tenemos de historia, los planes para el futuro, las ideas.

Las nubes son redes; las virtuales son de servidores que se conectan entre sí para proporcionar espacio de almacenamiento en el que también se ejecutan acciones, procesos de cómputo, algoritmos. Las reales consisten en elementos químicos y fenómenos físicos. En las reales se genera electricidad, las virtuales la necesitan. Todas tienen forma de metáfora. Cualquiera sirve para un poema, una melodía, o un sueño. Las nubes nos pertenecen sin ser nuestras.

La nube informática es un paradigma. La nube del cielo es un hidrometeoro. La nube sobre nosotros es un presagio. Tocar la nube es un deseo. Controlar la nube es controlar la vida. La frontera entre desear y controlar se deshace en un parpadeo, y atraviesa la Tierra.

 

No rain

Se le llama nube estelar a un grupo de estrellas que parecen estar muy cerca entre sí. La nube de electrones es el área que rodea al núcleo de un átomo. China sembró nubes para controlar el clima durante las Olimpiadas de Beijing. El millonario proyecto consiste en disparar al cielo balas de sales minerales para provocar la lluvia y limpiar el aire. O bien para que no llueva. Aún no se sabe del todo si funciona, pero se sabe que de las nubes depende el clima, y que del clima dependen la economía, la salud, la vida. China no es el único gobierno que ha buscado controlar el clima: desde los años setenta existen programas de modificación climática. Eso también está en la nube virtual.

 

Little Fluffy Clouds

Las nubes pueden ser blancas, grises o negras, pero también se encienden y colorean en los atardeceres y auroras porque dispersan la luz y tienen al arcoíris. Generalmente, las nubes se forman en la tropósfera, que es la capa de la atmósfera más cercana a la Tierra. Todo en ellas es dinamismo: están formadas de diminutas partículas y éstas están siempre en movimiento. No son vapor de agua, como suele creerse, pues de ser así no serían visibles: el agua que contienen está en forma líquida o sólida (hielo), y es sólo hasta que el vapor se condensa cuando la nube toma forma.

 

Stormy

Cirrus, Cumulus, Stratus, Nimbus. No es un conjuro para invocar demonios ancestrales; son algunos de los nombres que sirven para clasificar las nubes según su forma y su locación. No hay una nube igual a otra, pero los científicos han establecido categorías según sus similitudes. Se reparten en tres grandes categorías: las nubes más altas están a 15 mil metros de altura, en la capa superior de la tropósfera; luego están las de nivel medio, a 5 mil metros. Finalmente, las del nivel más bajo están apenas a un par de kilómetros de la corteza terrestre. Y existe una supercomputadora que simula nubes o su carencia, y lo que sería de nosotros sin ellas.

 

Morning Glory

También hay nubes raras, como la ondulante Kelvin-Helmholtz. Nubes en la estratósfera, nubes en Marte. Hay nubes de fuego, las Pyrocumulus, que surgen de incendios, volcanes o bombas atómicas. Si hace frío y se forma un gran hueco en una nube será un Skypunch. La nube enredadera o nube de gloria matutina es un fenómeno extraño que ocurre con poca frecuencia en una región de Australia, principalmente; tiene la forma de un kilométrico rollo que se desplaza a gran velocidad sin cambiar de forma. Aún se desconocen las causas, se sospecha de la brisa del mar en octubre.

 

Cloud Number Nine

Numerosos artistas han pintado nubes, han compuesto piezas musicales sobre nubes, han sido personajes y paisajes en cuentos y leyendas, las vemos en el cine y en los festivales escolares de primavera. Hay un artista que las crea en el interior de salas de museos y galerías: para el holandés Berndnaut Smilde, las nubes que hace son esculturas creadas con una técnica inventada por él. Es arte efímero, pues las nubes duran apenas unos segundos. Las crea con humo y vapor y tomando en cuenta las características de la locación, como su humedad y su temperatura. Pueden tener todas las formas. Se deshacen en un parpadeo.

MAGIS, año LX, No. 502, noviembre-diciembre 2024, es una publicación electrónica bimestral editada por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente, A.C. (ITESO), Periférico Sur Manuel Gómez Morín 8585, Col. ITESO, Tlaquepaque, Jal., México, C.P. 45604, tel. + 52 (33) 3669-3486. Editor responsable: Humberto Orozco Barba. Reserva de Derechos al Uso Exclusivo No. 04-2018-012310293000-203, ISSN: 2594-0872, ambos otorgados por el Instituto Nacional del Derecho de Autor. Responsable de la última actualización de este número: Edgar Velasco, 1 de noviembre de 2024.

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