La sorprendente emergencia de Carla Morrison
Enrique Blanc – Edición 433
En esta entrevista, Gil Gastélum, director de Cosmica Artists y promotor de Carla Morrison, habla sobre las estrategias de promoción y marketing de los músicos independientes. La historia y el ascenso de Morrison tiene semejanzas, toda proporción guardada, con la de otra estrella pop que ha sacado provecho de las nuevas tecnologías para obtener fama y fortuna: Lady Gaga.
Guardadas las proporciones, puede decirse que un fenómeno de popularidad similar al de Lady Gaga, acontecido en México, es el de Carla Morrison.
De un par de años a la fecha, Morrison se ha afianzado como un referente incuestionable de la nueva canción pop independiente, poseedora de una legión de seguidores que han hecho de sus conciertos en distinto foros —el festival Vive Latino, uno de ellos— un espectáculo de impresionante convocatoria. Pero poco se conoce acerca de la estrategia que se puso en marcha para que ella llegara a su público, y del responsable de ésta.
Gil Gastélum inició su compañía, Cosmica Records + Management, luego de graduarse de la Universidad de Arizona, en Tucson. El nombre de la empresa, recuerda Gastélum, proviene de las charlas que tuvo con su abuelo, quien se refería a “la raza cósmica” para aludir a la comunidad mexicana y chicana radicada en Estados Unidos. Cosmica se fundó en Austin, Texas, en 1999, y su primer artista fue el trovador David Garza. Paulatinamente se fue asociando a otros proyectos musicales, en su mayoría parte de la comunidad chicana. Así lo hizo con Tito & Tarántula y con Michael Ramos de Charanga Cakewalk. Su primera relación con la música mexicana fue por medio de Cecilia Bastida —quien fue parte del grupo Tijuana No—, hasta que llegó a Carla Morrison. Con ella, Cosmica aprendió a experimentar con la carrera de un artista, obteniendo resultados que nadie soñaba en la carrera de un músico independiente.
En la actualidad, Gastélum radica en Los Ángeles y sigue planeando el éxito futuro de otros nombres, entre ellos La Santa Cecilia, Piñata Protest, Pilar Díaz, Master Blaster Sound System y la mexicana Madame Recamier. En la siguiente charla, Gastélum reflexiona sobre el impacto que hoy tiene Carla Morrison, y revela algunos de los secretos que han propulsado su meteórico y fascinante éxito.
Foto: AFP
¿Cómo descubriste a Carla Morrison?
Escuché a dos personas hablar de ella, refiriéndose de forma muy entusiasta a su banda, Babaluca. Recuerdo haber escuchado su música y después ver a su banda en vivo. Me pareció que el grupo estaba bien, pero que la vocalista era increíble. Y pensé que si ella se hacía solista, seguro sería alguien importante. Unos dos meses después, Carla quiso conocerme porque había regresado a Tecate, luego de vivir en Phoenix, y quería lanzarse como solista. Estaba temerosa de mostrarme su música, lo que luego fue “aprendiendo a aprender”. Dijo: “Creo que es muy triste y muy lenta”. Le contesté que yo tenía un corazón melancólico y que era seguidor de Mazzy Star, y que por ello pensaba que lo suyo no era ni triste ni lento. Nos hicimos amigos de inmediato y también me convertí en su fan.
Cosmica comenzó a manejar la carrera musical de Carla de una manera muy novedosa. ¿Cuál fue la estrategia planteada?
Una de las cosas maravillosas de Carla es que tiene una forma increíble de decirte lo que tiene en mente y lo que le dicta su corazón. Justo cuando comenzamos a trabajar juntos me dijo: “La única forma en que puedo comenzar a hacer esto, es haciendo dinero lo más rápido posible”. En ese entonces yo trabajaba en el mercado musical como freelance con músicos como Smokey Robinson, Jackson Browne y algunos más. Había visto diferentes tipos de mercados y de modelos de negocio. Lo que aprendí de ello fue que incluso aquellos artistas que vendían de forma moderada perdían todo en las ventas al menudeo de sus CD. Así que desde entonces entendí para bien que había que hacer CD sólo para venderlos en los conciertos y que de esa manera se motivara a los fans a venir a verla en vivo. Y también que se podía tener los discos en iTunes, Amazon, etcétera, y no tener miedo de promoverlos ofreciéndolos gratis. También ayudó que artistas como Julieta Venegas y Natalia Lafourcade hablaran bien de ella. Así como lo hizo en Estados Unidos David Garza —el primer concierto de Carla en Estados Unidos fue abriéndole a él—. Luego pasó lo de Soy tu fan: usaron un track en una escena clave del show que conectó de golpe con los espectadores. Carla pudo capitalizar eso volando constantemente entre Tijuana y el DF, sin tener miedo de no ganar nada, como cuando abrió para Hello Seahorse en el Conga Room de Los Ángeles, o para Julieta Venegas en el Rio Casino en La Vegas.
Foto: AP
¿De qué manera ayudaron las redes sociales al desarrollo de su carrera?
Fueron un componente importante para que ella se volviera popular. Hoy en día hay sed de enterarse de lo que pasa con un artista más allá de las noticias de su carrera; hay quien básicamente pasa su vida frente a Twitter y Facebook. La gente se rindió ante Carla por eso. El más grande obstáculo que encaramos fue lo complicado que era responder a todos los fans cuando se volvió muy grande y conocida. Afortunadamente, sus clubes de fans y sus seguidores de verdad entendieron la evolución.
¿Cuáles redes sociales fueron más efectivas para ello?
Creo que Twitter en verdad ayudó. Carla es súper efectiva en ir directo al grano en lo que quiere comunicar en pocas palabras. Creo que fue por ello que comenzó a trabajar con Joaquín Wakks Pavia —su manager en México—. Facebook fue también efectivo para los fans que querían saber más de ella, sus fotos y artículos se convirtieron en una gran plataforma.
¿Cómo explicas el tremendo éxito de Carla Morrison?
Creo que Carla apareció en el momento exacto. Tuvo que ver con esta combinación de tecnologías, Twitter y Facebook, además de que escribe letras con las que mucha gente puede identificarse. Habla sobre amar y perder el amor, ¿y quién no lo ha experimentado? Ella no se ve como tantas modelos manufacturadas como las que ves en la televisión en México y Estados Unidos. Ella es tan hermosa como sus seguidores, y juntos se han adoptado.
Foto: www.facebook.com/carlamorrisonoficialmx
Desde tu punto de vista, ¿cuáles son las diferencias entre una compañía independiente y una multinacional?
Desde mi perspectiva, me encanta no tener un jefe. Yo soy el jefe, excepto cuando se trata de alguno de los artistas de Cosmica. Ellos siempre marcan el camino en lo que respecta a su mercadotecnia y su estrategia. Creo que en un sello grande hay más opiniones y, por ende, se hace lento el proceso de crear y lanzar música. Me gusta no tener que perseguir a un músico que tiene la necesidad de ser más grande o mejor que alguien más. Firmo artistas porque creo que son importantes y porque creo que la gente debe escucharlos. Simple. Si venden muchos discos, Cosmica podrá existir por más tiempo, y si no es así, podré decir que saqué un disco que me encantaba y en el que creía.
¿Qué significa la palabra “éxito” para Cosmica?
Ciertamente no es sinónimo de dinero; aunque es importante que nos ayude a tener las puertas abiertas. Creo que si una persona se toma el tiempo para escuchar a uno o varios de nuestros artistas, compra su música e indaga en lo que están haciendo, eso ya es éxito para nosotros.
¿Crees que sigue siendo importante vender discos hoy en día?
Claro que sí. Debes buscar la remuneración por tu trabajo de distintas formas: desde YouTube, por la venta de tus discos, las marcas que patrocinan, los conciertos. Tienes que ser capaz de ver todo ello.
¿Es posible que un artista viva hoy en día exclusivamente de sus conciertos?
Claro que es posible, especialmente para quienes pueden ser programados en la radio y tocan en escenarios grandes. A un artista independiente le ayuda ser creativo para buscar dinero en otras áreas. He visto artistas que trabajan como maestros de música y que además pintan y venden sus cuadros. En estos tiempos debes desarrollarte en distintos campos para poder vivir.
Foto: AFP
¿Qué opinas de la descarga de música gratuita?
Pienso que cuando se hace estratégicamente, como una descarga a partir de Starbucks o Sanborns, realmente puede ayudar a un músico a conseguir nuevas audiencias. Nosotros lo hacemos muy a menudo. Lo que no me gusta es cuando un disco, por decir uno de Carla, sale al mercado y esa misma mañana hay gente que te lo ofrece completo de manera gratuita; porque es el arte por el cual Carla no ha recibido pago en términos de dinero y entonces su corazón y su alma y su pensamiento son pisoteados sin respeto alguno. Nunca ha sido tan difícil para un músico hacer dinero como hoy en día.
¿Qué supones que pueda venir para la industria musical en lo años próximos?
Creo que veremos a los sellos grandes incorporar un estilo independiente a la hora de hacer sus lanzamientos y cultivar artistas a un nivel más bajo. Los sellos independientes ya están figurando de forma importante en eventos como los Grammy y los Grammy latinos. Creo que la promoción que se hace de contenidos que ves en YouTube y en los videos que incluyen letras será mucho más efectiva. Los modelos de suscripción se volverán complemento de Apple y Amazon. Parece que la gente está consumiendo y comprando música más que nunca. Sería muy bueno ver que la industria musical haga las cosas más bien que mal y que adapte la tecnología que pueda servirle para bien y no para su detrimento. m
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