El proyecto contempla la instalación de un juego de motores eléctricos en el sistema de frenos del eje trasero del auto. Esta simple adaptación conllevará un ahorro de 30 por ciento en el consumo de combustible y la consecuente reducción de emisiones contaminantes.
Uno de los problemas más importantes de las grandes ciudades es el exceso de automóviles particulares en las calles. No sólo se multiplican los tiempos de traslado, sino que aumenta la cantidad de emisiones contaminantes, un problema difícil de atacar. Aunque la industria automotriz está buscando soluciones que sean amigables con el medio ambiente —autos que funcionan con luz solar, con combustibles alternativos, con energía eléctrica—, los proyectos todavía se ven lejanos y difíciles de alcanzar por los bolsillos del grueso de la población. Al menos hasta ahora.
Desde Mountain View, en California, Estados Unidos, el mexicano Javier Rincón Perezsandi, el chileno Christian Henríquez y el argentino Leonardo Valente crearon la Exponential Motor Company, una empresa que tiene por objetivo desarrollar y comercializar elementos tecnológicos que permitan convertir cualquier automóvil en un coche híbrido de bajo costo. ¿Cómo? Desarrollando un kit que se puede instalar en el auto y que, sin necesidad de hacer modificaciones en el motor original, pueda convertirlo en un vehículo ecológico.
El proyecto contempla la instalación de un juego de motores eléctricos en el sistema de frenos del eje trasero del auto. Esta simple adaptación conllevará un ahorro de 30 por ciento en el consumo de combustible y la consecuente reducción de emisiones contaminantes. Además de estas ventajas, sus creadores enumeran algunas otras: su precio es accesible (no más de mil 500 dólares), se puede instalar en cualquier auto, es completamente reversible, requiere un mantenimiento mínimo y, con algunos complementos, también se pueden instalar dispositivos compatibles con teléfonos inteligentes.
Rincón, Henríquez y Valente presentaron su proyecto en la edición 2014 del Programa de Estudios de Posgrado (SGP, por sus siglas en inglés) que se celebra cada verano en el Parque de Investigación de la nasa en Silicon Valley. Para poder costear la compra del equipo y el desarrollo de los dispositivos, lanzaron una campaña de crowdfunding en la plataforma Indiegogo.com, iniciativa que fue exitosa: en un principio el equipo había planteado recabar siete mil dólares y, al cierre de la convocatoria, los donantes habían aportado un total de 9 mil 561 dólares: 37 por ciento más de lo esperado.
Entrevistado vía correo electrónico, Javier Rincón explica que una de las metas principales es que el dispositivo llegue al grueso de la población. “Queremos que se pueda aplicar en cualquier coche de tracción delantera. Nuestro reto ahora es terminar de diseñar el producto para poder enfocarnos en hacerlo de manera masiva”. Sobre cómo podría recibir la industria automotriz el proyecto, señala que “México tiene una industria muy sólida. Para nosotros tener estos proveedores locales será una gran ventaja. Estamos muy interesados en trabajar con ellos y hacer estas alianzas para adelantarles el camino”. m.