Siete juegos para la memoria
Lizeth Arámbula – Edición 427
Aquí te proponemos siete opciones que pueden ayudarte a ejercitar tu memoria. ¿Ya practicas alguno?
Ratmaze
Una simpática rata que recorre un laberinto fragmentado en busca de trozos de queso… o bien su representación en pixeles, en el videojuego en línea (gratuito) de www.pixeljam.com. Hay que intentar recordar cuál fue el camino elegido en cada ocasión mientras corre el tiempo al ritmo de ocho bits.
Dominó
Seguramente está en la lista de los juegos que más personas han jugado en distintas épocas y en numerosos países, todas ellas preguntándose: “¿Quién tiene cuál ficha?”. La estrategia principal consiste en llevar la cuenta y no olvidar precisamente eso: cuáles fichas se van poniendo y con cuáles se va quedando cada quien.
Rummy
Es el bisnieto del mahjong y primo del neoyorquino conquian (o del tejano “con-quién”).
Observar, planear, retener la jugada, sustituir fichas (o naipes) y aprovechar el tiempo son acciones que transcurren alrededor de una mesa durante una partida de rummy.
Rubik
Si algunos psicólogos afirman que hasta la vida social influye en el deterioro de la memoria, armar el cubo de Rubik nos ayudaría a preservarla —resolver el rompecabezas cúbico sería un ejercicio mental con el que evitaríamos el desgaste, dejando pasar el tiempo de forma lúdica más que “social”.
Crucigrama
Dicen que el del diario El País es de los más difíciles de resolver. El hábito de descifrar la información que rellena las líneas horizontales y verticales es un mecanismo que trae a cuento nuestros conocimientos en historia, química, geografía, etcétera. Pero seguramente también los del famoso “sentido común”.
Sudoku
Posiblemente derivado de los cuadrados latinos, Sudoku es el juego que consiste en “un sistema de probabilidades para representar una serie de números sin repetir”. Es común hallar la cuadrícula de 81 casillas impresa en los diarios, como una atractiva invitación a la deducción.
PAO
Los expertos en mnemotecnia utilizan esta técnica para asociar lo que quieren recordar con una Persona, una Acción y un Objeto. Luego, construyen “palacios de la memoria” —que bien pueden ser el propio cuerpo, o un edificio o un jardín imaginados—, para alojar ahí, por ejemplo, a Elvis Presley (la persona) cantando (la acción) con un micrófono (el objeto) y no olvidar el número 57, que habrían hecho corresponder arbitrariamente con esa combinación.
2 comentarios
Me pasa como con el vóleibol,
Me pasa como con el vóleibol, no los practico porque nunca sé las respuestas o no avanzo favorablemente y me desespero. Será porque mi memoria no es nada del sentido común. Recuerdo por ejemplo que por ahí de mis cinco añitos corría de un salón a otro para ausentarme de mis clases de kinder, y de que en el comedor nos daban calabazas, de que tiraba el agua de vez en cuando, también de la tez blanquísima y el color oscuro del cabello del niño de cinco años protagonista de mi primer intento de relación sentimental (que por cierto terminó horrible porque fui rechazada a priori). No sé ni capitales de muchos países, ni el nombre del Presidente Peruano, ni mi número de celular… En el próximo diario intentaré rellenar el crucigrama, solo para recordar a las amistades, que eso sí me gusta más.
¡Ey, Rox! Gracias por tu
¡Ey, Rox! Gracias por tu comentario. Un abrazo.
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