La ciudadanía, en alianza por el Sur de Jalisco
Patricia Karenina – Edición 413
Vecinos de catorce municipios se organizan por un mejor desarrollo social. Los ejes de trabajo: participación ciudadana, manejo de residuos, agua y empleo.
Los participantes: señoras de Tapalpa, jóvenes de Sayula, trabajadores agrícolas de Tuxpan, párrocos de Zacoalco de Torres, cooperativistas de Amacueca, mujeres ecologistas de San Gabriel. Se trata de los miembros de la Alianza Ciudadana para el Desarrollo Regional Alternativo–Sur de Jalisco, una organización de ciudadanos de catorce municipios con diversas causas de movilización y diferentes territorios.
La alianza es “parte de un mismo esfuerzo organizativo, independiente y ciudadano en la región”, comenta Rigoberto Gallardo, académico del Centro de Investigación y Formación Social (CIFS) del ITESO, y quien desde hace más de tres años acompaña el proceso de esta organización.
El trabajo de Gallardo, junto con el de otros tres académicos del ITESO, se inició con la localización de actores sociales, políticos y religiosos de la región, que mostraran cierta capacidad de organización, para convocarlos a trabajar este proyecto de la alianza ciudadana. En marzo de 2007, más de 80 participantes se comprometieron a hacer el diagnóstico sobre las problemáticas generales de sus municipios. Se detectaron los principales conflictos y se acordó desempeñarse en cuatro escenarios: ausencia de participación ciudadana, manejo de residuos, agua y empleo.
En el Sur de Jalisco nació el mariachi, el son, personajes como Juan Rulfo, Juan José Arreola y Carlos Santana. Es centro de origen del teocintle, de donde deriva el maíz, y su principal productor, junto con la leche y el huevo. Su diversidad en climas y suelos provee el marco ideal para una amplia producción de satisfactores humanos. El Sur es reconocido por su añeja historia de lucha gremial, campesina, obrera y urbana; pero también porque se toca de lejos la justicia y raspa profundo la desdicha.
“El agua es poco accesible para la mitad de la población y hay contaminación tanto en los procesos de producción agrícola, como en el manejo de los desechos. El modelo de desarrollo no ha respondido a las necesidades sociales”, señala el “Diagnóstico sobre el estado y vigencia de los derechos humanos en el Sur de Jalisco”, presentado en agosto de 2008 por Jorge E. Rocha Quintero, académico del Programa Institucional de Derechos Humanos y Paz del ITESO. En el rubro de seguridad, 76 por ciento de los encuestados para el diagnóstico plantea que la policía es corrupta y que en el derecho al trabajo los ingresos son precarios y el porcentaje de migración es alto.
Con trabajos conjuntos, el Programa del Desarrollo Regional Sur de Jalisco del CIFS impulsa procesos organizativos para el desarrollo integral de las comunidades en la alianza. Entre los resultados se tiene el diagnóstico por municipios que estimula proyectos actuales por microrregiones. Como parte de una formación continua se aprovechan las coyunturas y se organizan talleres de análisis sobre temas no habituales para los pobladores del Sur. Aclarar dudas sobre la reforma energética, por qué los alimentos encarecen y escasean, por qué existe violencia e inseguridad para los jóvenes, así como sobre las diversas participaciones en las elecciones federales y locales de 2009.
Académicos como Carlos San Juan Victoria, de la ciudad de México, analistas como Esteban Garaiz y otros miembros del CIFS expertos en aspectos ambientales, participación ciudadana y derechos humanos, han aportado sus experiencias al conocimiento de los miembros de la Alianza Ciudadana. Rigoberto Gallardo explica que el objetivo de estas intervenciones es “fortalecer los esfuerzos en los procesos de organización”.
La columna vertebral de la alianza es la conciencia de ser ciudadano con derechos, organizados para procurar que se hagan reales las soluciones a sus necesidades. “Lo que más se ha logrado es esta conciencia de ser un grupo regional que aporta más seguridad y fortaleza en los procesos”, añade Gallardo. La clave es la solidaridad y la confianza, dice el rector del ITESO, Juan Luis Orozco, sj, quien dada su experiencia en cooperativas reconoce estas dos herramientas como necesarias para lograr tanto una producción de calidad, como una buena comercialización. El rector charló con miembros de tres cooperativas de la Alianza Ciudadana para el Desarrollo Regional Alternativo–Sur de Jalisco, para firmar un convenio con la Fundación San Ignacio de Loyola, sobre proyectos productivos.
El mayor desafío en este tipo de proyectos es su maduración constante, recalca Carlos Ortiz, coordinador del Programa Desarrollo Regional del CIFS: “La participación continua es difícil de lograr, pero aquí hemos visto que la presencia no disminuye”. m.
Diagnóstico de una región
Éstas son las principales “dinámicas y tendencias sociales en materia de derechos humanos en el Sur de Jalisco”, planteadas en el “Diagnóstico sobre el estado y vigencia de los Derechos Humanos en el Sur de Jalisco”. Este estudio lo realizaron el Centro de Justicia para la Paz y el Desarrollo (Cepad) y el Programa Institucional de Derechos Humanos y Paz del ITESO, con base en 500 encuestas realizadas en 16 municipios de Jalisco.
1. Deterioro profundo de la vida cotidiana
La salud y la educación no son derechos universales, el agua es poco accesible para la mitad de la población y hay contaminación tanto en los procesos de producción agrícola, como en el manejo de los desechos […] Aproximadamente 20 por ciento de la población sufre una situación de marginación, vulnerabilidad y pobreza extrema.
2. Debilidad de las instituciones del Estado
Los gobiernos municipales son percibidos como corruptos, poco transparentes e ineficientes, por lo menos para la mitad de la población […] La mitad de los pobladores de la región conoce casos de tortura por parte de las corporaciones policiacas.
3. Poca capacidad de defensa de los derechos humanos
En la población general, el grado de participación y de organización que posibilite la defensa colectiva de los derechos humanos aún es pobre […] El deterioro de la vida cotidiana, la debilidad institucional y la poca capacidad de defensa de los derechos humanos forman una tríada que genera que cada una de esas tendencias se profundice y, por tanto, el incumplimiento de los derechos también se acrecienta.
Fuente: www.cepad.org.mx/pdf/Informe08.pdf
Un estudio de caso
:Actores sociales colectivos y construcción de ciudadanía a nivel municipal. El caso de Zapotlán el Grande, Jalisco, 1982-2003.
Rigoberto Gallardo, Plaza y Valdés /ITESO, 2009.