El acceso a internet como servicio público
Sergio Hernández Márquez – Edición 419
Varios países del mundo, entre ellos Francia, Estonia y Finalandia, han impulsado la tendencia de que el acceso al servicio de internet sea considerado como un derecho humano. En Puebla, el Ayuntamiento de esa ciudad aprobó ya que el internet sea uno de los servicios públicos que por obligación deba prestar el gobierno municipal
Puebla se convirtió este año en el primer municipio de México que se compromete, por ley, a facilitar el acceso a internet, al igual que otros servicios brindados por el Ayuntamiento, como el aseo, la seguridad pública y el tratamiento de aguas residuales.
El de Puebla es un ejemplo de una tendencia mundial que considera internet como uno de los servicios básicos para toda la población; países como Estonia, Finlandia y Francia, lo consideran ya como uno de los derechos de la población.
Si bien el caso de Puebla fue el más reciente en México, la legislación de Finlandia es ejemplar porque no sólo menciona que todo ciudadano tiene derecho a poder conectarse a la red, sino que obliga a las empresas de telecomunicaciones a brindar una velocidad de conexión de por lo menos un megabyte por segundo, que para el año 2015 se incrementará a 100 megabytes.
De acuerdo al portal estadístico de Finlandia, todos los habitantes de entre 16 y 34 años de ese país habían usado internet en los últimos tres meses. La falta de uso de la población de mayor edad es lo único que desvía la estadística para no poder asegurar que el cien por ciento tiene acceso a este servicio
En África, en cambio, donde las necesidades primarias de alimento, salud y agua potable están aún pendientes de resolver —y donde sólo el 9.6 por ciento de la población tiene acceso a internet, según la Unión Internacional de Telecomunicaciones de la UNESCO—, el derecho a tener una conexión de 100 megabytes suena a ironía…Y sin embargo, no lo es.
El 19 de septiembre de 2010, la UNESCO presentó un documento, denominado A 2010 Leadership Imperative: The Future Build on Broadband, en el que estima que un crecimiento de 10 por ciento en la penetración de banda ancha incrementa 1.3 por ciento del Producto Interno Bruto de un país.
El acceso a conexiones de banda ancha en países pobres no es sólo un pilar de la libertad de expresión, sino una condición clave para revertir los serios rezagos en educación y salud, y para dinamizar la economía. Por estas razones, se propuso que los 192 países miembros de Naciones Unidas implementen planes nacionales de acción respecto a la banda ancha, lo que ayudaría a alcanzar los Objetivos del Milenio, que buscan erradicar la pobreza en el mundo.
* De acuerdo a una encuesta mundial realizada por la BBC, 87 por ciento de los habitantes consultados consideran que el acceso a internet es un derecho.
* Hace un año, cuando la Secretaría de Hacienda intentó aumentar la carga fiscal por el servicio de internet, miles de ciudadanos frenaron la propuesta gracias a la presión ejercida vía Twitter con el hashtag #internetnecesario.