Para atraer el voto en México (1900-2000), una exposición
Carlos Enrique Orozco – Edición
Lo que ahora nos parece un despilfarro o incluso basura, puede ser motivo para una exposición en el futuro. Esta afirmación viene a cuento por una insólita exposición abierta el pasado 1 de marzo en el Museo del Objeto del Objeto (MODO) en el DF. Se trata de la muestra De Porfirio Díaz a Vicente Fox, Propaganda electoral en México durante el Siglo XX, integrada por más de 2 mil objetos diseñados para atraer el voto de los ciudadanos mexicanos en 21 campañas, desde la “elección” de Porfirio Díaz en 1900 hasta la de Fox en 2000.
A la distancia encontramos objetos que ahora nos parecen inverosímiles (y hasta prohibidos) en la propaganda electoral, como por ejemplo, cajetillas de cigarros light con la imagen de López Mateos (1958) o Delicados para apoyar a Díaz Ordaz en 1964. Lo más común son los carteles y botones (pins), pero también hay condones, plumas, ceniceros, cerillos, refrescos, calendarios, gorras, botellas de tequila, camisetas, bolsas para el mercado, discos, mandiles, pancartas, paquetes de semillas, vajillas de plástico, fotografías, juegos de mesa y otros objetos. También hay credenciales de afiliación (unas firmadas por el propio Porfirio Díaz, antecedentes de las clásicas “charolas” de influyente), discursos, manifiestos y hasta billetes de donativos por “50 centavos para el Partido Socialista de las Izquierdas”.
La exposición puede verse como un fascinante recorrido por la cultura política mexicana del siglo XX a través de los objetos usados en la propaganda electoral y también, en el sentido más amplio, por el consumo y la vida cotidiana. Además es muy oportuna en estos días en que está por comenzar formalmente la carrera presidencial para el 2012 y en la que parece haber tres candidatos con partidos fuertes detrás con posibilidades reales de ganar.
No se ha escrito mucho de la exposición en los medios nacionales, sin embargo, llamó la atención de publicaciones internacionales como la revista The Economist que la reseñó en “Prospero”, su blog de cultura, como una muestra de la publicidad política en México en el siglo XX. El redactor de la nota no deja de preguntarse por qué toda esta parafernalia electoral si casi todas las elecciones de México en estos años no se decidieron en las urnas, sino por la voluntad del presidente en turno por medio del PRI. Los interesados pueden consultar en este enlace: http://www.economist.com/blogs/prospero/2012/02/political-advertising-mexico
La exposición también es un buen pretexto para conocer el Museo del Objeto del Objeto (MODO), abierto en octubre del 2010 en una vieja casona Art Noveau de la colonia Roma en el DF por Bruno Newman y un grupo de interesados en el diseño.
En su página web (www.elmodo.mx) se presentan como “el primer espacio dedicado a coleccionar, conservar, exhibir y difundir diversas expresiones del diseño y de la comunicación”.
Tienen más de 50 mil piezas con objetos de empaques, envases, publicidad comercial y otros de los siglos XIX y XX organizados en 30 temáticas como tabacos, cerillos, papelería, envases de refrescos, veterinaria, artículos alimenticios, religiosos y hasta corcholatas. Un paraíso para quienes gustan de los tiliches; una referencia para los profesionales del diseño y la historia de la vida cotidiana y una curiosidad para los demás. Además cuenta con una tienda en la que se venden creaciones de diseñadores mexicanos y productos diseñados con la temática de las exposiciones. El MODO se encuentre en la calle Colima 145 y abre de miércoles a domingos.
1 comentario
Este es el tipo de
Este es el tipo de exposiciones que valen la pena para rastrear los rasgos distintivos de una cultura. El arte siempre ha sido elitista, y a veces se puede cuestionar si de veras representa a la cultura donde se origina. Pero de que estas cosas hablan de cómo somos como pueblo, ni duda cabe.
¡Chévere que lo hayas referido en tu Cierzo, Carlos Enrique!
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